Hoy ha sucedido lo que siempre había relegado al fondo de mi conciencia, lo más espantoso. Me han quitado al ser más querido.

Dios mío, cuida a la muchacha a quien amo sobre todas las cosas, devuélvemela sana y salva. He gritado y llorado y los niños conmigo, exceoto Albrecht. El gordito miraba y sonreía. No comprendía nada. Por los niños, he procurado sobreponerme. No me asomé a la ventana, mis fuerzas no me lo permitían y tú no debías ver mis lágrimas. Lola me conmovió por su bondad. Te vio agitar la mano cuando el coche arrancó, muy vigilado. Me consoló, pero de qué me sirve el consuelo.

Al atardecer fui a la estación a recoger a Christine. Lloraba mucho; creo que te quiere un poco. Y quien podría no quererte. Antes estuve con Lola en el sótano para sacar ropa de la maleta para los niños y al cerrar la puerta del sótano vi relampaguear la linterna del vigilante. Probablemente me vigilaba por si sacaba algo en secreto. Quizá tiene una orden de la Gestapo o quizá es un exceso de celo por su parte. Dios mío, seis hombres valientes para arrestar a una sola muchacha. ¡Seis hombres hechos y derechos! Y el fumador aún se daba importancia. Jamás olvidaré sus vilezas. Jamás (pág. 163)

Texto: Aimée y Jaguar, Erica Fisher, Ed. Seix Barral
Foto: Tito_lol

3 comentarios :

  1. para ya con estos escritos!!! niña que no lo aguanto...

    ResponderEliminar
  2. Me alegro mucho que hayas conseguido ese libro que llevabas tanto tiempo queriendo leer.
    Besos.
    silenceisgolden

    ResponderEliminar
  3. No he leído el libro pero sí he visto la película y es estremecedora, sobre todo alguna escena que te pone los pelos de punta.
    Un beso,

    Belisker

    ResponderEliminar

 
Copyright 2013 Dsdmona .